viernes, 14 de febrero de 2014

Hoy el programa Carne cruda me inspiró lo siguiente:

Quise cruzar la frontera
por la playa del Tarajal.
No llegué ni a la escollera,
pero sí a mi funeral.

La guardia incivil nos tiraba
pelotas desde las rocas.
Yo en el agua alucinaba.
¿Se creerán que somos focas?

Pero ese no era el caso.
Sabían bien lo que hacían.
Disparaban al negrazo;
a ver si me disuadían.

Yo braceando seguía.
casi no sabía nadar.
Al final venció la mar.
Se apagó la luz del día.

Estuve tantas lunas
cruzando mi continente.
El desierto con sus dunas,
la selva con sus serpientes.

Mafias y traficantes
de hombres, armas y drogas.
Policías y asaltantes.
Aprovechados con toga.

Todos buscando mi ruina,
queriendo sacar provecho
de mi miseria mezquina.
¡No tenían ningún derecho!

Ahora descanso en paz.
Mi familia aún lo ignora.
Todavía me creen capaz.
¿Qué será de ellos ahora?